Lama Djampa Gyatso nos introduce al bardo (I)

  • Durante los siguientes días, Lama Djampa Gyatso nos compartirá enseñanzas de Dudjom Rimpoche sobre el bardo. Dudjom Rimpoche fue maestro raíz de Lama Djampa Gyatso, y uno de sus grandes referentes.

En palabras de Dudjom Rimpoche:

“Se dice que toda la doctrina del Buda se podría resumir en la enseñanza de los seis bardos. El Budadharma es vasto y profundo, y los distintos enfoques de los diferentes vehículos y ciclos deenseñanzas abarcan una inconcebible abundancia de instrucciones. Para aquellos que desean obtener la fortaleza primordial de la budeidad en el transcurso de una única vida humana, la prácticade estas enseñanzas se expone estructurada en los seis bardos.

  ¿Qué es, pues, el bardo? Un bardo es un estado que «ni está aquí ni allá»; por definición es algo que sucede «entre dos cosas», un estado intermedio. Los seis bardos son:

  El bardo natural de la vida presente;

  El bardo alucinador del sueño;

  El bardo de la absorción meditativa;

  El bardo doloroso de la muerte;

  El bardo luminoso de la realidad última;

  El bardo kármico del devenir.

 

1. EL BARDO NATURAL DE LA VIDA PRESENTE

  El bardo natural de la vida presente es el periodo comprendIdo entre el nacimiento y la muerte. En este momento, por lo tanto, todos estamos en el bardo de la vida presente. Como se dice en las enseñanzas: “¡Kyema!” Ahora que estoy en el bardo de mi vida dejaré de ser perezoso porque en esta vida no hay tiempo que perder». Ése es nuestro estado actual. Debemos pensar detenidamente y preguntarnos cuántos años han pasado ya desde que nacimos y cuántos años nos quedan todavía. La vida es algo totalmente temporal; nada ni nadie puede escapar a la muerte. Es imposible que ninguno de nosotros viva eternamente. Y a pesar de estar en esta situación, malgastamos nuestra existencia vanamente, derrochando nuestro tiempo con la pereza y las distracciones. La vida sigue su curso y su fuerza vital acaba agotándose. Entonces todas las actividades concluyen y no se puede hacer nada más. Por eso se dice que no debernos permitirnos caer bajo el poder de la pereza y la distracción. Por el contrario, debemos practicar el Dharma, lo único que nos ayudará en el momento de la muerte. Aunque no podamos practicarlo todo, debemos practicar tanto como podamos, sabiendo que por el modo en que vivamos ahora podemos ejercer una influencia positiva sobre las condiciones de nuestra vida futura. Por lo tanto, debemos evitar tanto como nos sea posible incluso una sola acción negativa y nunca desperdiciar la oportunidad de realizar ni la más diminuta acción positiva. Puesto que nada es seguro, se dice que debemos comportarnos de modo que no tengamos nada de lo que arrepentirnos ainque muriésemos mañana. Éste es el primer bardo, el bardo de la vida presente.”

(Dudjom Rimpoche: Consejos Esenciales. Editorial Dharma. ISBN: 978-84-96478-08-4)